Operación Seducción
Liam seguía metiéndose en problemas después de la universidad, así que su hermano mayor, un director ejecutivo, le pidió a su mejor amigo, el despiadado Kyson, que lo cuidara. A pesar de las protestas de Liam, Kyson se mudó con él y le impuso una disciplina estricta. Decidido a sacar a Kyson de la universidad, Liam decidió seducirlo, obligando así a su hermano mayor a echarlo. Inesperadamente, en este juego de seducción, pasó de cazador a presa: Kyson demostró ser no solo mucho más encantador, sino también mucho más peligroso de lo que había imaginado. Finalmente, ante las constantes burlas de Liam, Kyson se rindió y lo inmovilizó, susurrándole una advertencia al oído: «Niño, no soy alguien a quien puedas controlar...».